¿Coche sin batería? Aquí tienes las posibles causas

¿Coche sin batería? Aquí tienes las posibles causas

Que el coche se quede sin batería puede tener muchas causas, siendo una de las averías más frecuentes, sobre todo en invierno.

Cuando la batería del coche se descarga, lo cierto es que no podemos hacer demasiado más que cambiarla o ponerle unas pinzas, pero de todas maneras vamos a ver cuáles son las causas más frecuentes de este fallo y cómo podemos detectar por qué se produce.

Causas de la descarga de batería y cómo detectarlas

Hay múltiples causas de descarga de la batería, de manera que vamos a ver las más frecuentes, las que nos suelen ocurrir a todos antes o después.

Edad de la batería

Si la batería no mantiene la carga, y por lo tanto es incapaz de arrancar el coche, lo primero que deberíamos hacer es mirar la factura de compra o recordar cuándo la adquirimos.

La edad es la principal causa de que la batería falle. De este modo, si tiene alrededor de cuatro años o incluso más, lo mejor es no preguntarnos por qué se descarga la batería de nuestro coche y cambiarla directamente cuando dé signos de fatiga.

El frío

El frío es otra de las causas por la cual una batería de coche no carga de manera correcta. Durante el buen tiempo puede funcionar bien, pero el frío afecta a su rendimiento, y el arranque del coche le “exige más” cuando las temperaturas son bajas.

Por eso, si la batería ya estaba al final de su vida útil y llega el invierno, lo normal es que al arrancar nos la encontremos descargada.

Nos dejamos las luces encendidas

A veces el fallo no es que la batería de coche no carga, sino que un error nuestro la ha dejado completamente vacía.

El error más típico es dejarnos las luces encendidas. En muchos coches se apagan al quitar el contacto y abrir la puerta, pero en otros (sobre todo en los más antiguos), este apagado automático no se produce, aunque sí suena un aviso sonoro si nos bajamos sin apagarlas.

Al estar las luces encendidas durante la noche o incluso varios días, la batería se agota de tal forma que ni siquiera funciona la apertura remota.

Usamos poco el coche

Para que la batería se cargue el coche tiene que moverse. De lo contrario, poco a poco el consumo eléctrico de algunos sistemas, como las alarmas, la van descargando hasta agotarla por completo.

Si usamos poco el coche, lo mejor es desconectar la batería o usar un mantenedor de baterías en el caso de tener acceso a un enchufe.

Una buena idea, al comprar un coche nuevo o uno de segunda mano, es comprobar dónde lleva la batería. Hay modelos que la tienen poco accesible, con casos extremos como un modelo de Dodge en el que hay que retirar el parachoques delantero para acceder a ella.

Hacemos trayectos cortos en ciudad

¿Usamos el coche en trayectos muy cortos? Esta es una de las causas de la descarga de la batería, pues con los consumos eléctricos de los coches actuales estos trayectos no son suficientes para cargarla por completo.

Fallos del alternador

Si la batería del coche no mantiene la carga, la cambiamos y ocurre lo mismo es más que posible que el fallo venga del alternador, la pieza que se encarga de recargar la batería cuando estamos en movimiento.

No es un fallo que ocurra a menudo, pero sí que hay que tenerlo presente sobre todo en coches con muchos km recorridos.

Detectar por qué se descarga la batería

Detectar por qué la batería no mantiene la carga no es algo que esté al alcance de cualquiera.

De hecho, como conductores lo único que podemos hacer es mirar la batería para ver si los bornes tienen colores extraños o una especie de “sal”, lo que nos indicaría que se está sulfatando y que hay que cambiarla, lo mismo que si nos damos cuenta de que está mojada.

Si se nos descarga a menudo y la batería no es muy vieja, lo mejor es llevar el coche al taller para que le pongan un multímetro y una pinza amperimétrica. De ese modo, podrán comprobar el estado y detectar si hay corrientes de fuga.

Como podemos ver, tener un coche sin batería puede deberse a varias causas, algunas evidentes y otras que solo puede descubrir un profesional. De todas maneras, lo mejor es prevenir y cambiar este elemento cada cuatro años.

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